empiezo esta carta con una pregunta provocadora y un poco difícil:
¿Cual es mi mayor esperanza?
Si, ¿en que espero?Hace una año me preparaba al adviento con la esperanza de poder recibir bien a los nuevos misioneros que iban a estar con nosotros. Llegaron Massimo y el P. Orazio.
En este mes el padre Orazio ha regresado a Italia y por ahora no espero otro sacerdote.
Se me ha hecho difícil despedirme de un amigo y colaborador valioso como el padre Orazio, pero igual hay que seguir caminando y mirando adelante.
¿Qué espero entonces en este momento?
Para mi lograr una nueva "conversión pastoral", eligiendo lo esencial, el servicio a nuestra gente, dando más tiempo a la pastoral juvenil y pastoral social que había tomado en cargo mi hermano sacerdote.
También tengo esperanza que nuestra parroquia vaya creciendo como casa y escuela de comunión, y que nos sintamos una familia lista para acoger al Niño Jesús en la próxima Navidad.
El evangelio de Marcos en efecto nos recuerda: "No sea que venga inesperadamente"(Mc 13,36)
Esto es mi mayor deseo, que las próximas semanas de adviento sean para nosotros cargadas de una esperanza teologal, divina, luminosa.
con cariño,
p. Ambrogio Cortesi
Ver también el Mensaje de Adviento de los Obispos Peruanos
1 comentario:
Dios lo bendiga p. Ambrogio
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