martes, 2 de febrero de 2010

Presentación del Señor

La festividad de la presentación del Señor al templo es una fiesta de luz que se inserta en el ciclo navideño cumpliéndolo 40 días después de la Navidad.
Tiene un doble sentido:
- Purificación. Primera lectura: "Purificará a los hijos de Levi". (Mal)
- Consagración: "Todo varón primogénito será consagrado al Señor". (Lc)
El protagonista es "El Hijo unigénito, revestido de nuestra humanidad". (Oración colecta)
Hoy especialmente los sacerdotes y religiosos estamos invitados a renovar nuestra consagración.
Me parece bien completar esta pequeña reflexión con las palabras de Orígenes: "El santuario no hay que buscarlo en un lugar, sino en los actos, en la vida y en las costumbres. Si son según Dios, si se amoldan a los mandatos de Dios, poco importa incluso que estés en la casa o en la plaza: si estás sirviendo a Dios, estás en el santuario, no te quepa duda".

Termino con una simple invocación:
Purifícame, conságrame, renuévame!

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Realmente se puede creer en eso?

Existe un Dios??


muy buen texto!!

:)

donambro dijo...

Gracias por la apreciación.
Yo recibí el don de la fe desde pequeño.
Siento que creer en Dios es lo más hermoso e importante de mi vida.
No tengas duda, Él está a la obra.
Solo hay que tener mucha disponibilidad para escuchar su paso en nuestra vida.