jueves, 21 de abril de 2011

Homilía en el Jueves Santo 2011

"La víspera del día solemne de la Pascua, sabiendo Jesús que había llegado su hora, como amaba a lo suyos, les dio la mayor prueba de amor que pueda darse" (Antífona de hora tercia).
LA PASCUA Y EL AMOR

1. La PASCUA significa el "Paso" - un cambio de estación o un cambio de vida.
Fiesta de pastores y agricultores con un cordero inmolado y con pan sin levadura.
Con el libro del Éxodo cambia de significado para indicar la liberación de la esclavitud que corresponde al nacimiento del pueblo de Israel.
El 6 de abril del año 30 de nuestra era, por las palabras del mismo Jesús pasó a cambiar nuevamente de significado.
Es un nuevo "Paso" que de allí en adelante se tendrá que celebrar: la Hora en que Jesús tenía que pasar de este mundo al Padre.
Por eso la Pascua cristiana no es solamente la cena pascual, sino un proceso que se desarrolla en tres días como si fueran uno solo.
El Misterio Pascual comprende todo el Triduo Santo: la Cena del Señor, la Pasión y muerte de Cristo y la Resurrección.
Son los tres focos principales de la que, en conjunto, es la Hora de Jesús, la Hora de pasar de este mundo al Padre.

2. El AMOR. El Cenáculo será recordado siempre como el lugar de la intimidad de Jesús con sus discípulos.
No solo entrega a ellos el mandamiento del amor, sino que "dio la mayor prueba de amor que pueda darse".
¿A qué se refiere? Jesús lo demuestra en un acto de gran expresividad asumiendo el papel del esclavo en el lavado de los pies. Acto que genera comprensibles reacciones en los discípulos y especialmente en Pedro.
¿Esta es la prueba de amor más grande? ¡Claro que no! Esto es solo un gesto simbólico, que Jesús explica luego.
Entonces, ¿Cuál es la prueba de amor más grande? No es un símbolo, sino una realidad: la entrega total y definitiva.
Para entenderlo viene en nuestro socorro la segunda lectura: "En la noche en que iban a entregarlo tomó pan...": la Eucaristía es la prueba de amor más grande frente al mal, a la intolerancia , a la incomprensión y a la traición.
Jesús dice: "Este es mi cuerpo" o sea: "Lo entrego por ustedes, a pesar que me fallaron o me fallarán".

3. Conclusión.
La conclusión es un compromiso de imitar y repetir lo que vemos, escuchamos, vivimos esta tarde.
"Hagan esto en conmemoración mía".
"Lo que hice con ustedes, ustedes también lo hagan".

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